Hay una tecnología que ha revolucionado desde el modo que vemos series o películas hasta cómo escuchamos nuestra música favorita. Además, ha favorecido la aparición de nuevos formatos de contenido, e incluso la transformación de los que ya existían para poder adaptarse a las nuevas ‘reglas de juego’. En este post vamos a explicar qué es el streaming, las modalidades que existen y la emergente figura del streamer.
El término ‘streaming’ podría traducirse del inglés como transmisión o emisión en continuo o en directo, y hace referencia a la distribución de contenidos multimedia por canales digitales.
Así, si tuviésemos que definir qué es streaming diríamos que es la tecnología que permite consumir contenidos por internet sin tener que hacer una descarga previa de archivos a nuestros dispositivos: ordenador, tablet, móvil, etc.
¿Para qué se utiliza el streaming?
Dado que gracias al streaming se pueden enviar contenidos de audio o video a cualquier aparato conectado a internet, los usuarios tienen la posibilidad de acceder a películas, series, música o podcast en el momento que quieran, sin estar limitados por condicionantes como, por ejemplo, los horarios de programación de la televisión tradicional.
De este modo, ahora cuando vemos Netflix lo que hacemos es acceder a los contenidos de una plataforma de streaming, que tiene siempre disponible todo su catálogo para que sus suscriptores lo consuman a la carta cuando lo deseen.
Además, al permitir prescindir de la bajada de archivos, no requiere la ocupación de espacio de almacenamiento en el dispositivo del usuario, y tampoco que este deba esperar un tiempo hasta que la descarga esté lista.
Funcionamiento del streaming
En las emisiones tradicionales había una codificación en ondas de las imágenes y sonidos que luego eran descodificados por los receptores, que eran los aparatos de televisión o radio.
El streaming en cambio funciona de manera totalmente diferente, al no existir un único canal abierto entre la fuente y el receptor. En vez de esto, los datos son agrupados en pequeños paquetes por la fuente y enviados a los dispositivos de recepción por internet. Además, van etiquetados para que nuestros aparatos los ordenen correctamente, y ya cuando hay suficientes paquetes consecutivos los portátiles, tablets o móviles pueden comenzar a retransmitirlos en streaming.
Todo el proceso que acabamos de describir recibe el nombre de buffering, y eso sí puede verse afectado por la existencia de problemas de conexión a internet, o bajas velocidades, que provoquen que el contenido no se reproduzca bien, o con una mala calidad de las imágenes o audios.
Modalidades de streaming
Más que de distintos tipos de streaming, ya que el funcionamiento de la tecnología no varía, podemos hablar de los diferentes usos que se hacen de este formato para la distribución digital de contenidos.
Streaming de video
El streaming más relevante ahora mismo sería el de video, que encontramos desde en plataformas como las de Netflix, Amazon Prime Video Disney+ o Movistar, hasta en portales que son muy importantes desde hace mucho tiempo como YouTube, que se sirve de la misma tecnología aunque pueda ofrecer un tipo de contenidos audiovisuales diferentes, y tenga también un modelo de negocio distinto que las primeras (que de momento carecen o limitan mucho la publicidad) que repercute en la experiencia de los usuarios.
Streaming de música
El streaming ha redimensionado igualmente la manera que tenemos de escuchar música, haciendo que sean obsoletos soportes como los CD, discos, etc. O incluso la propia descarga de archivos MP3. Así, ahora gracias a servicios de distribución como los que brindan Spotify o Apple Music se puede acceder a toda la música de cualquier artista, hacer infinidad de listas de reproducción a gusto del usuario, etc.
Por ello, actualmente cuando una artista como Rosalía hace un lanzamiento su éxito no se mide por aquello de las ‘copias vendidas’, o ni siquiera ya por el número de descargas, sino por la cantidad de reproducciones que el tema haya podido tener en un solo día en Spotify.
De igual modo, los podcasts en streaming están suponiendo a la radio tradicional, lo que las películas, series y programas en streaming a la tele de antes.
Streaming de videojuegos
Asimismo, el streaming de videojuegos abre nuevos horizontes a las experiencias de los usuarios, al suponer también una evolución con respecto a los soportes físicos, o a la descarga posterior que consumía mucho espacio de almacenamiento en los dispositivos locales, dada además la complejidad de desarrollo y creciente sofisticación de los juegos.
Streaming en directo
El Streaming en vivo más que una modalidad como las que acabamos de ver sería un formato propio, debido a que hace una retransmisión de eventos que están sucediendo en ese momento. Aquí, cabrían desde los partidos de fútbol de plataformas como Dazn o Movistar, hasta los directos en un canal como Twitch que pueda hacer alguien como Ibai Llanos.
¿Qué es un Streamer?
La mención a Ibai nos viene muy bien para explicar lo que es un streamer, a quien podemos definir como alguien que crea contenidos y/o realiza retransmisiones en directo que ofrece vía streaming. En este sentido, sería una figura muy parecida al youtuber, si bien el streamer tiende más a operar en canales como Twitch, que le permiten interactuar con sus seguidores por chat mientras hace las retransmisiones en directo.
Esperamos que todo este universo del streaming te resulte tan apasionante como a nosotros, ya que en Lomba Producciones, como especialistas en el ámbito del video profesional, nos interesan mucho los nuevos horizontes que pueden abrir para la creación audiovisual las tecnologías que van emergiendo.